El 29 de febrero de 2024 se organizó en Bangkok (Tailandia) la segunda consulta regional sobre “La exposición de la protección de las élites y la corrupción en los delitos contra el medio ambiente en el Sudeste Asiático y Oceanía”, en el marco del proyecto ECO-SOLVE.
La consulta fue presentada por Louise Taylor, Representante para Asia-Pacífico del GI-TOC, e inaugurada oficialmente por Andreas Roettger en nombre de la Delegación de la Unión Europea en Tailandia. Tras una breve introducción a ECO-SOLVE, los delitos contra el medio ambiente y la corrupción en el Sudeste Asiático y Oceanía, a cargo de Kristina Amerhauser, del GI-TOC. Los ponentes compartieron y debatieron estudios de casos, experiencias y puntos de vista sobre: oportunidades, técnicas y métodos utilizados anteriormente para desvelar la protección de las élites; dinámica tras las grandes revelaciones sobre corrupción; y puntos débiles existentes a escala local, nacional y mundial que permiten que prospere la protección de las élites contra los delitos medioambientales en el Sudeste Asiático y Oceanía.
Diecinueve participantes, entre ellos periodistas, académicos y defensores del medio ambiente, debatieron sobre los retos relacionados con el descubrimiento de la protección de las élites, las secuelas de las revelaciones sobre corrupción y las deficiencias sistémicas del marco regulador. Entre los temas clave se incluyeron la disminución del espacio para los medios de comunicación y la sociedad civil, los riesgos para la seguridad, la falta de información pública y la inaccesibilidad de los datos gubernamentales.
Los participantes insistieron en la necesidad de una colaboración coordinada entre las partes interesadas y las fronteras, el rastreo de los beneficios ilícitos y la comprensión del papel del sistema bancario internacional. También debatieron las limitaciones de las sanciones en el Sudeste Asiático y el papel de las organizaciones internacionales a la hora de exigir responsabilidades a los actores de la corrupción.
Se expresó gratitud por la oportunidad de intercambiar experiencias, y los conocimientos adquiridos sirvieron de base para la siguiente fase de la implantación de ECO-SOLVE. Se identificaron estrategias para racionalizar los mensajes, crear campañas globales y dirigirse a audiencias clave. Se debatieron cuestiones lingüísticas y se iniciaron conversaciones sobre la colaboración con periodistas de Malasia, Indonesia, Camboya, Filipinas y Papúa Nueva Guinea.
El evento sirvió de valiosa plataforma para fomentar una comprensión más profunda de los retos que plantean la protección de las élites y la corrupción en los delitos contra el medio ambiente en la región. A medida que ECO-SOLVE avanza, los conocimientos compartidos y los esfuerzos de colaboración pretenden generar un cambio significativo en la lucha contra los delitos medioambientales y la corrupción en el Sudeste Asiático y Oceanía.