Del 6 al 8 de junio de 2023, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito ( UNODC), INTERPOL y la Unión Europea pusieron en marcha la tercera fase de CRIMJUST en la sexta reunión anual de este programa mundial, que se llevó a cabo en Río de Janeiro (Brasil). Esta tercera fase de programación, ejecutada por la UNODC e INTERPOL y financiada por la Unión Europea en el marco del Programa de Flujos Ilícitos Globales (GIFP), tendrá por objeto reforzar las investigaciones transnacionales y la cooperación en materia de justicia penal con miras a desarticular los flujos de tráfico ilícito y la delincuencia organizada conexa. Esta fase se caracteriza, en particular, por el cambio del enfoque basado en los productos básicos, la expansión a la región del Caribe, un mayor énfasis en las estrategias de desarticulación financiera, la integración de los derechos humanos y la perspectiva de género en la lucha contra la delincuencia organizada.
Esta Reunión Anual congregó a 25 interesados nacionales de América Latina, el Caribe y África, junto con 11 representantes de los principales socios del programa, como MAOC-N, EMPACT, CARICOM, las redes especializadas de fiscales, incluidas REDCOOP, CPLPL, RFAI y WACAP, así como otros proyectos del GIFP, como AIRCOP, SEACOP, COLIBRI y MASIF.
Durante la ceremonia de apertura, Elena Abbati, Representante de la UNODC en Brasil, expresó su agradecimiento a la Unión Europea por su confianza y apoyo constantes a CRIMJUST y destacó la fuerte colaboración entre la UNODC, INTERPOL y la UE. Además de esbozar los principales cambios estratégicos que caracterizan a CRIMJUST III, anunció que el Coordinador Mundial de CRIMJUST tendrá su sede en Brasilia a partir de ahora. Afirmó que esta decisión permitiría al programa reforzar aún más su compromiso con la creación de vínculos transregionales estratégicos entre las Américas, África y la Unión Europea. El Sr. Roberto Valent, Director Regional de la Oficina de las Naciones Unidas de Coordinación del Desarrollo para América Latina y el Caribe, se hizo eco de sus observaciones y recordó el papel fundamental desempeñado por la UNODC para ayudar a los Estados miembros a traducir sus compromisos internacionales en acciones concretas. Subrayó la importante asistencia técnica prestada por CRIMJUST no sólo para facilitar las investigaciones transnacionales, sino también para aumentar la capacidad de resistencia frente a la delincuencia organizada y promover las normas de derechos humanos en todas las intervenciones e iniciativas de justicia penal.
Por su parte, Victor Barbabella Negraes, de la Policía Federal de Brasil, y Fernando Rocha de Andrade, de la Fiscalía brasileña, expresaron su agradecimiento a la UNODC por sus esfuerzos en la promoción de la cooperación y subrayaron la importancia de dar prioridad tanto a las actividades de interdicción como a las investigaciones de bienes para desarticular las redes de delincuencia organizada. Destacaron los esfuerzos y las capacidades de Brasil en la investigación de la delincuencia organizada, y reiteraron su compromiso de compartir su experiencia con los países presentes para identificar oportunidades de luchar conjuntamente contra las redes ilícitas.
Por último, el Excmo. Sr. D. Ignacio Ybáñez, Embajador de la UE en Brasil, recordó que “los grupos de crimen organizado son actores impulsados por el mercado, así como la inherente naturaleza transnacional de los mercados ilícitos”, señalando que “el 40 por ciento de los grupos de crimen organizado en la UE se dedican a más de una actividad delictiva principal, mientras que el 65 por ciento tiene miembros de múltiples nacionalidades”. En este contexto, afirmó que el GIFP era “un esfuerzo concertado para responder a los retos planteados por unas rutas y redes de tráfico ilícito cada vez más globalizadas, fragmentadas y diversificadas” y subrayó “la necesidad de iniciativas interregionales con múltiples partes interesadas, como CRIMJUST, para colmar las lagunas de capacidad y establecer vínculos transregionales entre los países”.
Esta reunión anual sirvió de plataforma para presentar los nuevos objetivos y prioridades de CRIMJUST en el marco de su tercera fase de programación. En 2023 el programa cumplió ocho años desde su lanzamiento, inicialmente con el fin de reforzar la cooperación y las capacidades a lo largo de las rutas transatlánticas para investigar y perseguir el tráfico de cocaína. Como tal, la reunión también sirvió para presentar los logros clave, las lecciones aprendidas y las buenas prácticas identificadas en sus dos primeras fases. Con unas 341 actividades ejecutadas hasta ahora, el programa ha facilitado acciones de cooperación en materia de justicia penal en América Latina y África a raíz de 334 incautaciones o detenciones importantes de drogas como resultado de 47 Foros de Investigación de Casos.
A medida que el programa se orienta hacia la facilitación de la cooperación en materia de justicia penal para desarticular todo tipo de flujos ilícitos, las partes interesadas nacionales presentaron los cambios y novedades observados en el panorama delictivo de sus países y compartieron los retos encontrados en la realización de investigaciones transnacionales. Las conclusiones de estas presentaciones se complementaron con los debates de los grupos de trabajo sobre tráfico transnacional de drogas y delitos contra el medio ambiente, así como con las prácticas de integración de los enfoques basados en los derechos humanos en las respuestas de la justicia penal. En ellos se puso de relieve la convergencia de los mercados ilícitos, ya que los grupos criminales organizados responden fácilmente a los cambios en oferta y demanda y diversifican su modus operandi para eludir a las fuerzas del orden, al mismo tiempo que optimizan sus ingresos. Por último, los profesionales destacaron los retos que plantea el pleno cumplimiento de las normas de derechos humanos, ya que las investigaciones requieren cada vez más el uso de técnicas especiales de investigación para localizar e interrumpir las comunicaciones cifradas.
Las Reuniones Anuales siguen siendo una de las actividades emblemáticas del calendario de CRIMJUST, ya que aportan información para garantizar que el programa se mantiene en consonancia con las prioridades de las partes interesadas y refuerza su estrategia programática general para el futuro.
La tercera fase de CRIMJUST está financiada por la Unión Europea en el marco del Programa de Flujos Ilícitos Globales. Su objetivo es reforzar las investigaciones transnacionales y la cooperación en materia de justicia penal para desarticular la delincuencia organizada y perseguir objetivos de gran valor.
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