El 20 de marzo de 2024, la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado (GI-TOC) presentó en un evento celebrado en Bruselas ECO-SOLVE, un programa global financiado por la UE cuyo objetivo es desbaratar los flujos ilícitos contra el medio ambiente. Este proyecto de tres años forma parte del Programa de los Flujos Ilícitos Globales (GIFP, por sus siglas en inglés) y su objetivo es vigilar eficazmente el comercio en línea, extraer datos útiles y digestibles que puedan servir para informar las acciones de las autoridades competentes y el sector privado, al mismo tiempo que se fomenta una mayor transparencia y rendición de cuentas en los mercados ilícitos en línea. El programa también pretende abordar la pérdida de biodiversidad y el cambio climático en cooperación con la Plataforma Multidisciplinar Europea contra las Amenazas Delictivas (EMPACT).
Entre los objetivos de ECO-SOLVE figuran la creación de bases de datos mundiales sobre el tráfico de especies silvestres, el descubrimiento de pruebas de la corrupción de las élites que están detrás de la industria de madera ilegal, el apoyo a los esfuerzos de las fuerzas del orden, la capacitación de las comunidades locales y la contribución a la formulación de políticas mundiales eficaces. En el acto de presentación se esbozaron estrategias para alcanzar estos objetivos, con la participación de personal de la Comisión Europea, representantes de EMPACT y GIFP, expertos en delincuencia organizada, funcionarios intergubernamentales y organizaciones sin fines lucrativos.
Entre los retos destacados en el acto figuran la corrupción en las zonas protegidas y el papel de Internet en el tráfico de especies silvestres. La guardabosques jefe Cathy Dreyer, del Parque Nacional Kruger de Sudáfrica, habló de la repercusión de la corrupción en la caza furtiva de rinocerontes y la caza ilegal, mientras que representantes de la sociedad civil, las fuerzas del orden y el sector privado compartieron las mejores prácticas para combatir el tráfico de especies silvestres por Internet. Iniciativas como la Ley de Servicios Digitales de la UE y la supervisión financiera por parte de instituciones como Standard Chartered Bank se destacaron como herramientas cruciales.
También se subrayó la importancia de la participación de las comunidades en la lucha contra los delitos contra el medio ambiente. Los oradores destacaron la sensibilización de los miembros de las comunidades, el apoyo a las comunidades indígenas y el fomento de la confianza entre las fuerzas del orden y las poblaciones locales.
El acto logró presentar el compromiso de ECO-SOLVE de apoyar a las fuerzas del orden, a los grupos comunitarios y de crear redes para combatir los delitos contra el medio ambiente, contribuyendo así de manera significativa a los esfuerzos mundiales de conservación.
