El 29 de agosto de 2023, el proyecto Enhancing Africa’s Response to Transnational Organised Crime (ENACT) impartió el seminario “Oro, armas e inestabilidad: la delincuencia organizada transnacional en África Oriental”. El seminario arrojó luz sobre la intrincada red de retos que afligen a la región.
ENACT, una acción del Programa de Flujos Ilícitos Globales financiada por la Unión Europea (UE), aprovechó este seminario para profundizar en la delicada interacción entre los conflictos, la delincuencia y la inestabilidad a la que se enfrentan los países de África Oriental. ENACT se gestiona a través de un consorcio formado por el Instituto de Estudios de Seguridad (ISS), INTERPOL y la Iniciativa Mundial contra la Delincuencia Organizada Transnacional (GI-TOC).
La situación en África Oriental sigue siendo compleja. La guerra civil hace estragos en Sudán, mientras Etiopía recorre el incierto camino de un acuerdo de paz recientemente negociado. En respuesta a una contraofensiva, Somalia se enfrenta a los ataques de Al Shabaab, lo que agrava aún más la crisis. Las emergencias humanitarias han desarraigado a millones de personas de sus hogares, mientras Kenia experimenta protestas públicas generalizadas contra la escalada del coste de la vida y de los impuestos. Estos retos erosionan colectivamente el liderazgo político, socavan las estructuras de gobernanza y amplifican el descontento público, lo que puede proporcionar un terreno fértil para la expansión de las redes de delincuencia organizada y la proliferación de prácticas corruptas.
El punto principal del seminario fue el nexo crítico entre conflicto, delincuencia organizada e inestabilidad. El representante de la UE subrayó que las perturbaciones causadas por los conflictos debilitan considerablemente la gobernanza y el Estado de Derecho. Esto, a su vez, crea oportunidades para que la delincuencia organizada se infiltre en la sociedad y corrompa a los funcionarios, perpetuando así un ciclo de inestabilidad.
Kouassi Yeboua, investigador principal del programa Futuros e Innovación en África del ISS de Pretoria, afirma que el problema se agrava porque África Oriental cuenta con una población joven en crecimiento. Casi la mitad de sus habitantes tiene entre 15 y 29 años. Las elevadas tasas de desempleo entre los jóvenes, unidas al limitado acceso a la educación, han contribuido al aumento de la delincuencia.
Rumbi Matamba, analista del Observatorio de África Oriental y Meridional de GI-TOC, siguió a Kouassi con una presentación de datos del Índice de Delincuencia Organizada en África 2021 de ENACT. Explicó la estrecha relación entre conflicto y delincuencia. Matamba destacó dos países contrastados, Kenia y Somalia. A pesar de su relativa seguridad, Kenia ha experimentado un aumento de mercados delictivos específicos como el tráfico de armas y de seres humanos. Este auge se ve incrementado por la influencia de agentes estatales. Por el contrario, Somalia, asolada por los conflictos, ha experimentado una reducción marginal de la actividad delictiva, posiblemente atribuida a fluctuaciones en mercados o actores delictivos específicos.
El seminario continuó con presentaciones sobre la situación actual de la seguridad en torno al lago Victoria y Etiopía, así como sobre el tráfico de armas en Uganda y la pacificación de las bandas políticas keniatas. Willis Okumu, investigador principal de ENACT en Nairobi, afirmó que el lago Victoria había sido desatendido por los gobiernos de los tres países que comparten su frontera: Kenia, Tanzania y Uganda. Esto ha provocado un aumento no sólo del comercio ilícito de drogas y sexo, sino también de la contaminación y la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
En Etiopía la situación es frágil, ya que el reciente conflicto y un acuerdo de paz bastante reciente han hecho que el país sea menos resistente a la delincuencia organizada. Tadesse Metekia, investigador principal de ENACT, en la sede de Addis Abeba, afirmó que se ha producido un aumento significativo del tráfico ilegal de oro, así como de drogas y trata de seres humanos.
En Uganda, la violencia armada alcanzó su punto álgido durante los meses de marzo, abril y mayo de 2023, debido a las incursiones de tribus regionales en la frontera con Kenia relacionadas con el robo de ganado. Sin embargo, el oficial de la Policía ugandesa que presentó cree que esta reciente oleada de violencia armada y tráfico de armas de fuego en la región puede controlarse reforzando la cooperación entre las agencias de seguridad y los países vecinos.
Ken Opala, analista del Observatorio de África Oriental y Meridional de GI-TOC, explicó por qué en 2022 las bandas políticas de Kenia no seguían como de costumbre. Opala afirmó que la reforma constitucional, la importante presión de la Corte Penal Internacional, las coaliciones de partidos políticos, la preparación de los servicios de seguridad y la nueva gobernanza constitucional eran todos factores cruciales en el mantenimiento de la paz en Kenia.
Mientras la región se enfrenta a estos complejos retos, el seminario demostró la importancia del proyecto ENACT. Con la misión de mejorar la respuesta de África a la delincuencia organizada transnacional, el proyecto ha creado una plataforma para el análisis y el diálogo en colaboración, basada en el análisis de la inteligencia criminal local y en la investigación basada en pruebas. Esta plataforma, ejemplificada por el seminario, pretende abordar la intrincada dinámica del conflicto, la delincuencia y la inestabilidad, fomentando los esfuerzos de cooperación y las estrategias innovadoras para la paz y la seguridad en África Oriental.